sábado, 12 de diciembre de 2009

CAPITULO I: Fundadores



Los primeros pulperos fueron los canarios, como establece don Rafael Ramón Castellanos, filósofo, historiador, autor del libro "Historia de la Pulpería en Venezuela" y regente de La Gran Pulpería de Libros Venezolanos, un verdadero templo del buscador de rarezas bibliográficas y del coleccionista de curiosidades de época, ubicado en Chacaíto, precisamente donde antaño estuvo una de las principales pulperías de Caracas.


"En las fundaciones de los pueblos había tres fenómenos el administrativo, el real, que era la autoridad del rey y el clerical, el cura que iba con la cruz por delante. En otras palabras, estaban presentes el alguacil, el misionero y el comerciante. Para que hubiese economía tenía que haber alguien que comprase o cambiase a los agricultores e indígenas lo que ellos producían por lo que necesitaban, como aceite o especias. Así pues el pulpero, el alcalde, el alguacil y el cura echaron la base de la formación de todas las ciudades españolas de América.


Alrededor de la Plaza San Jacinto, que durante la Colonia fue el Mercado Mayor de Caracas, se abrían los portales que fueron los antecedentes de las pulperías. "Aquí en el mercado el que tenía un hato compraba al mayor, pero los pulperos compraban para distribuir al menor.


Las grandes pulperías caraqueñas llegaron a ser los verdaderos centros comerciales de la época, emplazados en los cruces de caminos, alcabalas o en la entrada a las ciudades.


"Esas pulperías tenían posada y terreno suficientemente sembrado de pasto para los arreos. El arriero jugaba un papel muy importante en la historia de la economía colonial y lo siguió jugando en la historia del abasto y aquí en Caracas hasta los años cuarenta. El lechero andaba en su burrito repartiendo la leche por La Pastora. Todavía en los años cincuenta descargaban en Caño Amarillo arreos de mulas. De Galipán siguieron bajando en mula flores y hortalizas hasta los años setenta".


No hay comentarios:

Publicar un comentario